El 5 de enero de 1895, el dictador Ulises (Lilís) Heureaux inauguró en la ciudad de Santo Domingo el servicio de electricidad.
Lilís Heureaux, cuya segunda administración a partir de 1886 estuvo marcada por la intolerancia, también se destacó por las grandes obras públicas. Fue la época en que el país obtuvo logros materiales extraordinarios que no había tenido antes, como fue el servicio de electricidad inaugurado el 5 de enero de 1896.